Conoce las 7 malas compañías que te engordan

Conoce las 7 malas compañías que te engordan.

Quizá algo más allá de tu voluntad te está arruinando los planes de tener la figura que tanto deseas. Mira a tu alrededor, puede que alguien cerca a ti no te ayude a mantenerte en forma ¡Descúbrela y ponla en raya!

1) La amiga envidiosa. Mientras tú solo necesitas bajar un par de kilos, ella necesita más esfuerzo. Verse de grandes medidas y tú con poco por hacer le origina cierta envidia y rencor. Una manera de sentirse mejor es haciendo que comas todo lo que ella come, de manera sutil te convencerá que hacer dieta no hace efecto y te hará pecar para que sigas rellenita, más o igual que ella.

2) La antojada de tu oficina. Como su nombre lo dice, siempre está pensando en comida, habla de las delicias que han llegado a sus pensamientos, en ir al nuevo restaurante que se ha inaugurado en la ciudad o aquella que siempre te pregunta si quieres algo de comer porque irá a la tienda por algo y puede traerte algo para ti también. Ella te tienta a probar cosas poco saludables y que rompen con tu dieta.

3) La experta culinaria. Ella conoce cada restaurante de la ciudad, es una erudita en materia gastronómica. Siempre está ofreciéndose para llevarte a que conozcas un nuevo lugar para que pruebes de mil delicias grasosas y calóricas que, sin duda, rompen con tu dieta. O ya sabes que, simplemente reunirte con ella implica un gran buffet en su casa o una salida contundente de almuerzo o cena.

4) La regia por suerte. Aquella amiga que por gracia divina come, come y no para de comer, pero nunca engorda ni medio gramo. Ella intenta convencerte que es imposible renunciar a los placeres de la comida y que engordar solo está en tu cabeza, entonces te invita a que disfrutes de comer sin remordimiento ¡Claro! Solo que ella no engorda, pero tú sí.

5) La loca fitness. Esa amiga que anda día y noche en el gimnasio y que suele caer en la tentación de comerse un gustito o más de uno, pero tras su atrevido descuido suele quemar cada caloría que consume, pero a ti te es imposible seguir dicha rutina. Por tanto, mientras ella se deshace hasta del postre con una sesión en el gym, tú terminas rendida y deprimida porque sabes que no eres una adicta a los ejercicios.

6) La amante de los bares. Aquella amiga que al igual que tú es soltera y cuyo plan de fin de semana es beberse varios vasos de alcohol que le quiten las penas de amor, pero que contienen grandes cantidades de azúcar (muchas calorías). Sabes que cada salida implica por lo menos tres tragos y que estando en plena conversación tampoco le dicen no a un grasoso o contundente piqueo para acompañar sus bebidas.

7) Tu compañera experta en repostería. Dos o más veces por semana lleva a su oficina las nuevas creaciones que ha preparado como parte de sus nuevas recetas o su último curso en cupcakes o queques caseros. Ser su degustadora oficial te está costando más horas en el gimnasio y el alejarte de tu plan de dieta.