“Los cinco héroes de Cuba”, como se les conoce en La Habana, serán ahora tres. El próximo 27 de febrero, el segundo de los cinco cubanos condenados en Estados Unidos, en 2001, por delitos de espionaje saldrá en libertad y se prevé, será deportado a la isla. La liberación de “los cinco” ha sido, durante los últimos 15 años, una de las banderas de la política exterior cubana y una de las condiciones que ha puesto Raúl Castro para avanzar en el diálogo migratorio con Washington.
Fernando González, de 50 años, procesado en Estados Unidos bajo el nombre de Rubén Campa, saldrá en un mes de la prisión federal donde se encuentra detenido, en Safford, Arizona, según muestran los registros de la Oficina de Prisiones. El 18 de diciembre de 2001, González fue condenado por la Corte Federal del Distrito Sur de Florida a pagar 19 años de prisión por varios delitos de espionaje y años más tarde fue favorecido con una reducción de la condena a 15 años por buen comportamiento. Se prevé que al salir de la cárcel podría ser deportado.
Los cinco espías cubanos fueron detenidos en territorio estadounidense en septiembre de 1998 y acusados de infiltrarse en instalaciones militares ubicadas en Florida, para informar a La Habana de movimientos de naves y tropas. El Gobierno de Fidel Castro alegó que cumplían la misión de infiltrar las actividades de los grupos anticastristas de Miami, con la finalidad de frustrar nuevos ataques armados contra la revolución.
La liberación de “los cinco” ha sido una bandera de Cuba y sus aliados durante los últimos 15 años
En diciembre de 2001, cada uno de ellos fue condenado a purgar penas distintas. Gerardo Hernández Nordelo, Antonio Guerrero Rodríguez y Ramón Labañino Salazar fueron sentenciados a cadenas perpetuas –en el caso de Hernández, a dos cadenas perpetuas. Fernando González Llort –Rubén Campa-, a 19 años de prisión. Y René González recibió una condena de 15 años y fue liberado tres años antes de cumplirla, en octubre de 2011; vive en Cuba desde mayo de 2013.
La liberación de “los cinco” ha sido una bandera de Cuba y sus aliados durante los últimos 15 años y un punto de honor en las negociaciones migratorias La Habana y Washington renovaron en 2013, después de dos años de silencio. En la más reciente ronda de conversaciones, que se llevó a cabo en la isla el pasado 10 de enero, la delegación estadounidense también reclamó la liberación del contratista estadounidense Alan Gross, condenado a 15 años de prisión en Cuba “por actos contra la seguridad del Estado”.