¿Qué enfermedades pueden contagiarnos las mascotas?

Descubre qué males pueden transmitir tus mascotas.

Aquí les enumeramos algunos de los males -y sus riesgos- que las personas pueden compartir con cinco tipos de mascotas.

Gatos:

El arañazo de gato produce inflamación y fatiga.

Los gatos también son portadores del parásito Toxoplasma gondii, responsable de la toxoplasmosis.

Los perros, ovejas y ganado también pueden tener este parásito que se encuentra comúnmente en las heces del animal.

Es muy difícil saber si el gato está infectado porque no suele mostrar síntomas.

Si el parásito está en el ambiente o en la cadena alimenticia, se corre el riesgo de ser ingerido por humanos.

El mayor peligro está en las mujeres embarazadas, quienes le pueden pasar la infección al feto, que puede desarrollar daños en el cerebro y ceguera.

Es posible que las personas con toxoplasmosis no noten los síntomas o que tengan unos muy parecidos a la gripe o a la mononucleosis infecciosa (también conocida como fiebre dura).

Perros:

Las garrapatas pueden causar la enfermedad de Lyme tanto en perros como en seres humanos, pero es más probable que una garrapata pase de persona a perro que de este animal a un humano.

El síntoma más común es una erupción roja alrededor de la mordida del insecto. Esto es seguido por síntomas parecidos a la gripe; pero si no se trata a tiempo, la enfermedad de Lyme puede causar inflamación en las articulaciones y ocasionar problemas neurológicos.

Las garrapatas que provocan esta afección suelen habitar en zonas boscosas y templadas donde los perros pueden pasear con sus dueños.

La rabia es una enfermedad grave que se puede transmitir por la saliva de la mordida de un animal infectado, en este caso el perro.

Causa fiebre alta y un comportamiento agresivo, pero también se puede propagar al cerebro y sistema nervioso, lo que sería fatal.

Si bien esta enfermedad está presente en 150 países, es en el sur y sureste asiático donde se produce más del 95% de las muertes de seres humanos por rabia, 55.000 al año.

Reptiles:

Los reptiles pueden ser fuente de una forma rara de salmonella, perteneciente a la familia de bacterias Enterobacteriaceae. Esta causa dolor de cabeza, fiebre, dolor abdominal y diarrea, así como erupción en el pecho y espalda.

Esto se debe a que los reptiles, en especial las culebras, llevan la infección en la piel y las heces.

Los bebés y niños son más vulnerables a desarrollar una forma grave de la enfermedad.

Para evitar que los reptiles pasen la infección a seres humanos, el departamento de Salud Pública de Reino Unido recomienda no besar a este tipo de mascotas y lavarse muy bien las manos después de manipularlas.

Roedores:

Los roedores más comunes que se usan como mascotas son hámsteres, ratones, ratas, diponidos, conejillo de indias o cobayo, cuniculus o pacas y chinchillas.

Todos los roedores, ya sean mascotas o silvestres, pueden ser portadores de bacterias y virus que causan infecciones en seres humanos.

Uno de ellos puede ser el hantavirus, una enfermedad potencialmente fatal, que causa desde una gripe moderada hasta afecciones respiratorias graves o enfermedad en el riñón.

Otras infecciones que los roedores pueden pasar a los humanos son la leptospirosis, fiebre de mordida de rata y un tipo de meningitis causada por un virus llamado coriomeningitis linfocítica.

Si bien se tratan de enfermedades poco comunes, estas infecciones pueden producir consecuencias graves.

Loros:

La psitacosis es una infección bacteriana que afecta a los pájaros, en particular a los loros.

También puede afectar a otras especies como el perico australiano, cacatúa ninfa, guacamayas, así como patos, gaviotas, gorriones y gallinas.

Es una enfermedad que se transmite por el aire y que puede pasar a las personas que tienen o trabajan con estos animales.

Causa fiebre, diarrea, infección en los ojos y puntos rojos en el cuerpo.