Corea del Norte y Corea del Sur protagonizaron un nuevo intercambio de disparos a ambos lados de la zona desmilitarizada (DMZ) que divide a ambos países, informaron las autoridades de Seúl, que señalaron que no hubo heridos de su bando.
El incidente tuvo lugar a las 17:40 hora local (08:40 GMT), cuando soldados surcoreanos realizaron disparos de advertencia ante el acercamiento a su demarcación de un grupo de efectivos norcoreanos, que a su vez respondieron abriendo fuego, según relató un portavoz del Ejército surcoreano a la agencia local Yonhap.
El fuego cruzado se produce después de que esta mañana soldados surcoreanos efectuaran otra ronda de disparos de advertencia ante la aproximación de militares norcoreanos a la frontera, mientras que el pasado día 10 ambos bandos intercambiaron disparos en otro incidente parecido.
La refriega se produjo cerca de la localidad fronteriza de Paju, a unos 40 kilómetros al noroeste de Seúl, y se prolongó durante aproximadamente diez minutos.
El Ministerio surcoreano de Defensa desconoce si algún soldado norcoreano resultó alcanzado por los disparos, mientras que los medios oficiales de Pyongyang no han dado ninguna información al respecto.
Seúl está «analizando la situación en detalle» y por el momento no ha detectado «ningún movimiento inusual» de tropas norcoreanas cerca de la frontera, según la antes citada fuente.
El pasado día 10, el fuego cruzado fue originado por unos disparos desde el lado norcoreano tras el lanzamiento de globos con pancartas por parte de manifestantes surcoreanos contrarios al régimen de Pyongyang, y en ese caso tampoco hubo constancia de que se produjeran víctimas.
La concentración se celebraba cerca de la DMZ con motivo del 69 aniversario de la fundación del Partido de los Trabajadores de Corea del Norte, y su convocatoria había recibido las amenazas del régimen liderado por Kim Jong-un.
Norte y Sur permanecen técnicamente enfrentadas desde la Guerra de Corea, que finalizó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz.