En medio del inmenso dolor que le producían las quemaduras de tercer grado provocadas por su conviviente, luego de que echara gasolina y le prendiera fuego, murió esta madrugada la enfermera técnica Sonia Apaza Cahuana, de 28 años, en el Hospital Regional del Cusco.
La información fue confirmada por Natalia Cahuana Morales y Edgard Apaza Quispe, quienes lloran la muerte de su hija. Ella deja en la orfandad a dos niños de cinco años.
Con el fin de trasladar el cuerpo de Apaza Quispe a su pueblo natal en Tambobamba, región Apurímac, ambos progenitores iniciaron los trámites en la morgue y solicitan apoyo económico para su entierro.
Mientras tanto, la policía se encuentra tras la búsqueda de la pareja de la víctima, Wilfredo Pareja Serrano.