La Corte Suprema de Estados Unidos suspendió hoy los matrimonios homosexuales en Utah, al menos temporalmente, al aceptar una solicitud de funcionarios estatales que apelaba un dictamen de un tribunal de primera instancia que permitió la realización de casamientos entre personas del mismo sexo en una zona con gran presencia de mormones.
La decisión de la Corte Suprema suspende los casamientos homosexuales en Utah mientras el caso es apelado en el Décimo Circuito de la Corte de Apelaciones de Denver.
Centenares de parejas homosexuales –se calcula que más de 900 personas– de Utah han recibido licencias de matrimonio desde que se produjo el 20 de diciembre el dictamen del juez de distrito Robert Shelby.
Utah se convirtió en el décimo octavo estado de Estados Unidos en extender el derecho a casarse a los homosexuales, luego de que Shelby diera la razón a tres parejas del mismo sexo que presentaron una demanda contra una enmienda de la Constitución estatal que definía el casamiento como algo exclusivo entre un hombre y una mujer.
La decisión llegó como un balde de agua fría para muchos de los 2.8 millones residentes de Utah, dos tercios de los cuales son miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, conocida como Iglesia Mormona.
La doctrina mormona establece que las relaciones sexuales fuera del matrimonio entre personas de sexos opuestos son contrarias a la voluntad de Dios.