El arquero recordará los detalles de su romance con la actriz y animadora Tula Rodríguez, actual esposa del gerente de ATV, Javier Carmona. Flores aseguró a Correo que su verdad no afectará a la «Peludita» y que el ejecutivo le merece respeto.
¿Qué te motivó a participar en El valor de la verdad?
Yo quería sacar todo mi pasado a la luz. Luego de contar mi verdad, me sentí liberado. Me pareció una experiencia interesante porque yo soy un pata alegre.
Tienes fama de irresponsable, fiestero y «jugador», ¿cambiarás esa imagen en el EVDLV?
La gente puede hablar, opinar, y yo lo respeto. No vivo de la gente, hago mi vida como mejor me parezca, y si cometo un error, soy un ser humano.
¿Al contar tu verdad involucras a otras personas?
No involucro a nadie, porque es mi verdad. No he insultado, no he amenazado, no me he metido con nadie. Es mi verdad y punto. Me preguntaron por Tula, por Maribel (Velarde), por Shirley Cherres. Ellos (los de la producción) averiguan y uno se sienta en el sillón rojo y te agarran frío y tienes que responder con la verdad.
¿Cómo debe esperar Tula Rodríguez tus confesiones?
Sentada, o capaz no lo vea, no lo sé. El tema no es solo ella sino también otra persona (Maribel Velarde). Es mi verdad, y si les molesta, será problema de cada una.
¿Por qué dijiste que Javier Carmona te parece «un tipo sport elegante»?
No es algo malo. Sport elegante es un hombre que se viste con jean, polo y zapatillas. No era una burla ni una crítica por su matrimonio con Tula. ¿Por qué voy a criticarlo? Al señor no lo conozco, pero merece mis respetos. Cuando estuve con Tula, nunca lo conocí, y ahora que él está con ella no tengo por qué decir algo. Si lo veo en la calle, lo saludo.
¿Por qué crees que Tula no aceptó sentarse en el sillón rojo?
Es que es una señora casada, tiene su relación estable y se perjudicaría ella misma. Mi mensaje es que no tengo por qué meterla en problemas. Cuento mi pasado, pero no todo; sin embargo, hay preguntas que la involucran y son reales.