Según comentó Rosa Quiroz, mientras se disponía a remojar las lentejas al interior de una olla, se percató de un mal olor que emanaba al interior de la bolsa. Pero grande fue su sorpresa cuando se dio cuenta de la presencia del roedor, el cual tenía pegado pedazos de lentejas en su estómago.
La mujer se comunicó con un representante de la distribuidora. Sin embargo, desde la empresa negaron la responsabilidad en el hecho, señalando que trabajan con todas las medidas de seguridad sanitarias en el lugar