Una funeraria de Puerto Rico conocida por sus elaboradas velaciones puso el cuerpo sin vida de un boxeador local en un ring.
Christopher Rivera Amaro, de 23 años, murió tras recibir varios impactos de bala. “Era una promesa del boxeo”, dijo Elsie Rodríguez, vocera de la funeraria Marín.
Su esposa y familia querían un funeral que resaltara su carrera como boxeador. “Era un boxeador y quisieron vestirlo como un boxeador y mostrarlo como si estuviera boxeando”, indicó.
La familia ayudó a construir un ring de boxeo en un centro comunitario. Les tomó cerca de dos horas construir el cuadrilátero y preparar el cuerpo.
“Miles de personas asistieron a la velación en la tarde del último jueves. Fue enterrado el viernes”, dijo Rodríguez en declaraciones reproducidas por CNN en Español.