El Perú gestiona nueva reunión de la Unasur por situación en Venezuela

El canciller Rafael Roncagliolo anunció hoy que el Perú gestiona una nueva reunión entre los líderes de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), a fin de analizar la situación de Venezuela, donde los opositores al presidente Nicolás Maduro han denunciado represión y agresiones físicas.

Explicó que para que la cita internacional se concrete, previamente debe existir un acuerdo sobre la posición a tomar y que ello “está en proceso de consulta”.

Roncagliolo evitó pronunciarse sobre si Maduro cumple o no el acuerdo adoptador por la Unasur en Lima, en el que se pide diálogo, tolerancia y la auditoría transparente de los votos de la elección del 14 de abril.

“Yo no puedo responder esa pregunta (…) La respuesta la tiene que dar la Unasur en su conjunto y no un canciller por separado”, manifestó.

El último viernes, el canciller pidió diálogo y tolerancia al gobierno chavista, lo que ocasionó una respuesta fortísima de Maduro contra Roncagliolo. “Usted se equivocó canciller del Perú; se equivocó, ha cometido el error de su vida, Roncagliolo”, dijo el mandatario venezolano en aquella oportunidad.

IMPASSE CON ECUARDO ESTÁ SUPERADO  
El ministro de Relaciones Exteriores sostuvo, además, que el Gobierno actuó en la defensa de los intereses del Perú en el caso del ex embajador ecuatoriano en Lima Rodrigo Riofrío Machuca, quien golpeó a dos mujeres peruanas en un supermercado de Magdalena del Mar.

“Hemos actuado defendiendo los intereses del Perú, la importancia que tiene la relación que estamos construyendo con Ecuador y la necesidad que todos teníamos de que el embajador Riofrío, que fue agredido, pero que respondió de manera inadecuada e impresentable para nosotros, dejará el país. Se consiguió eso y ahora lo que toca es construir la mejor relación posible con el Ecuador”, añadió.

También aseguró que el presidente Ollanta Humala decidirá si el relevo del ex embajador Luis Raygada es un diplomático de carrera o no.

El canciller dio estas declaraciones tras reunirse por cinco horas con la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso. La sesión fue reservada a su pedida, “porque se tocaron temas que involucran a países vecinos”.

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