Cuando los doctores le dijeron a sus padres que su visión estaba empeorando rápidamente, ellos le preguntaron qué cosas y lugares del mundo quería ver.
El niño hizo una lista de deseos. Eligió entre otros el Gran Cañón, las cataratas del Niágara, el edificio Empire State y el cuartel general de Google en California.
Además, como prefiere el baloncesto al rugby y el criquet, más populares en su país, dijo que le gustaría ver un partido de los Boston Celtics en los Estados Unidos.
El año pasado la visión de Louis se redujo en en 50% y era esencial hacer el viaje lo antes posible. Por suerte un emprendedor de Boston conoció las desgracias de la familia e hizo gestiones para que se cumpliera el sueño del niño.
Louis acaba de cumplir su último deseo visual: ver jugar a su equipo favorito de baloncesto, Boston Celtics.