La reconocida psicoterapeuta Carmen Gonzáles opinó sobre el triángulo amoroso conformado por Juan Manuel Vargas, Tilsa Lozano y la esposa del primero, Blanca Rodríguez.
Para la especialista, el llanto de la ‘vengadora’ no se explica por el amor hacia el futbolista, sino más bien por problemas no solucionados en su infancia.
“Yo la veía llorar en la televisión y uno sabe que cuando hay un drama presente se puede llorar, pero cuando el drama es del pasado, pero en el presente lloramos como si el drama estuviera ahorita, eso quiere decir que se trata de un problema de su infancia que aún no está resuelto”, manifestó.
“Cuando alguien ha sido bien amado por sus padres, busca alguien quien lo ame; pero cuando uno no ha sido bien amado y se desesperaba desde niño para que lo amen, guardas este deseo insatisfecho en una cajita. Y luego, cuando ya eres adulto, te vas a enamorar en esa forma, de alguien no para que te ame, sino para que desear que te ame y llorar”, añadió.
Según dijo, cabe la posibilidad de que Lozano Sibila vea en un amor no correspondido como le del futbolista de la Fiorentina, al amor que no pudo recibir de alguno de sus papás.
“Cuando ella llora por el futbolista Vargas, no llora por él, sino por un padre o madre que no la amó (…) a mí me parece que ella tiene un amor patológico y eso no es normal. Un amor sano es cuando a uno le corresponden, ¿pero eso de amar sin esperanzas?”, continuó en RPP Noticias.
Tres inmaduros
Finalmente, Gonzáles consideró que los tres personajes involucrados en esta historia son inmaduros. “El asunto no es de ella, sino de tres personas en un triángulo y los tres con inmadurez notable”, sostuvo.
“Si hay una mujer que tiene su autovalor, su autoconcepto bien, no va a permitir que el esposo tenga una relación paralela”, dijo sobre Blanca Rodríguez.
“Si fuera un hombre seguro, no va a necesitar tener a la esposa y a la vez a otra persona, para sentirse poderoso, y no darse cuenta que a los niños también les hace daño el ver a su madre ansiosa, angustiada”, refirió sobreJuan Manuel Vargas.
“Y la otra persona, la señorita que es la tercera, si ella se estimara, se buscaría un hombre que se vaya a casar con ella, para no sufrir”, concluyó sobre Tilsa.