Son pequeños cambios los que te ayudan a quemar más calorías y ayudarte en el proceso de perder peso.
1. Escoge estos alimentos cada vez que comas: Suena loco, pero la consistencia de las frutas, verduras y granos, hace que tu boca trabaje más en masticar, y el alto contenido de fibra hace que gastes más calorías en digerirlas. Todo combinado se traduce en un 10% más en el consumo de calorías.
2. Concéntrate en las proteínas magras: Las proteínas también requieren de más calorías para digerirse, mientras te mantienen sintiéndote llena y satisfecha, así que asegúrate de incluirlas en cada comida y snack.
3. Haz 20 flexiones: Antes de cada comida y snack, haz entre 20 y 50 flexiones de brazos. Las rutinas cortas e intensas de ejercicios pueden llevar a que quemes hasta 200 calorías más durante el día. Nada mal, ¿no?
4. Toma té verde o agua: El té verde contiene catequinas, un antioxidante que eleva el metabolismo en un 4% (alrededor de 80 calorías al día). Si no te gusta el té, anda por agua para evitar la deshidratación.
5. Tómate 5 minutos: El estrés no sólo hace que comas más, pero también puede desacelerar tu metabolismo. Por eso, es importante que te tomes descansos durante los días que sean estresantes. Si tienes un trabajo de escritorio, ten en cuenta que se ha demostrado que estar sentada durante una hora o más, reduce las enzimas quemadoras de grasas hasta en un 90%, así que párate y da una vuelta rápida, o haz una rutina de yoga liviana.