uillermo Alejandro fue investido ayer como nuevo rey de Holanda, tras prestar juramento ante las dos Cámaras del Parlamento y después de que su madre Beatriz abdicó formalmente en su favor, tras 33 años de reinado.
En una glamorosa ceremonia, realizada en la Nueva Iglesia, ubicada frente a la Plaza Dam y a sólo unos metros del Palacio Real, la reina Beatriz firmó su abdicación, Guillermo Alejandro tomó juramento y prometió defender al reino, según un reporte del sitio Dutch News.
“Juro que defenderé y guardaré siempre con todas mis fuerzas la independencia y la integridad del territorio del reino”, afirmó el nuevo rey ante la Constitución, los miembros de los Estados Generales (las dos cámaras del Parlamento) y el ministro de Holanda, Mark Rutte.
“Hoy cedo el lugar a una nueva generación”, dijo Beatriz, antes de registrar su firma en el Acta de Abdicación. La reina anunció su decisión el pasado 28 de enero.
La argentina Máxima Zorreguieta, de 41 años de edad y esposa de Guillermo Alejandro, se convirtió automáticamente en reina pero no en jefa de Estado, cargo que sólo puede desempeñar el nuevo rey.
El rey de Holanda agradeció a su madre por sus 33 años de reinado y también por haber realizado “plenamente el papel de madre y de esposa, y por el apoyo en los momentos tristes”.
El ahora rey pidió a los holandeses afrontar juntos el futuro incierto y los exhortó a “oír su propia voz, llevar su propia contribución, su propio talento” por el bienestar de todos y el país.
Camarón que se duerme…
Cabe recordar que cuando el entonces príncipe Guillermo Alejandro visitó México en mayo de 2009 causó revuelo entre los medios de varios países, más que por su estancia, por el vocabulario que empleó para urgir a líderes del sector energético a impulsar el uso de energías renovables.
Durante una reunión con empresarios, el ahora rey concluyó su discurso con el famoso refrán mexicano “Camarón que se duerme se lo lleva la chingada”, lo que provocó la risa de los asistentes pero también severas críticas.
Una argentina con corazón holandés
Con su carismática sonrisa, Máxima, de origen argentino, es la primera latina que llega a la realeza, convirtiéndose en uno de los miembros más luminosos de la Casa de Orange.
En su discurso, Guillermo Alejandro también dirigió una palabras a Máxima, ahora reina consorte, quien aseguró que es holandesa de corazón desde que contrajeron matrimonio el 2 de febrero de 2002.
“Tomó el país entre los brazos y se convirtió en una holandesa entre los holandeses, lista para ponerse a su servicio”, destacó.
A la ceremonia de investidura asistieron las tres hijas de la nueva pareja real, Catalina Amalia, Alexia y Ariana, miembros de la realeza europea, como el príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa Camila; el heredero de la corona española, Felipe de Borbón y su esposa, Letizia.
Además del príncipe Alberto II de Mónaco y la princesa de Japón, Masako, entre cientos de invitados especiales, entre ellos diplomáticos acreditados en Holanda y otros dignatarios de varios países de todo el mundo.