La joven de 13 años sólo sufrió un gran susto a la media noche. Se presume que la falla fue por reemplazo la batería por una no original.
Ariel Tolfree, una joven de Texas, se llevó un gran susto al percibir el olor a quemado debajo de su almohada. Su smartphone, un Samsung Galaxy S4, se había incendiado.
“El plástico, el cristal. Ni siquiera se puede decir realmente que se trataba de un teléfono”, declaró el padre de la menor para Fox News.
Hasta el momento se manejan varias tesis sobre la causa del incendio. La primera de ellas es que el terminal se sobrecalentó cuando estuvo demasiado tiempo debajo de la almohada.
La otra era que la batería no era original. Samsung se ha comprometido a reemplazar el smartphone.