La fortaleza y las palabras de una adolescente de 15 años, única sobreviviente del ataque en Texas perpetrado por su ex tío, que asesinó a sus padres y a sus cuatro hermanos en su presencia, ha conmovido a los estadounidenses, que se refieren a ella como a una heroína o una elegida.
Cassidy Stay fue la única sobreviviente de la masacre perpetrada la semana pasada por Ronald Lee Haskell, ex marido de su tía, que se presentó en casa de la familia preguntando por el paradero de su antigua pareja y, al no obtener la respuesta que buscaba, ejecutó fríamente a todos los familiares.
Katie Stay, de 34 años, su esposo, Stephen, de 39, y cuatro de sus cinco hijos, de edades comprendidas entre los 4 y los 13 años, fueron asesinados en el suelo y murieron en una zona residencial en el área metropolitana de la ciudad de Houston (Texas) el pasado miércoles.
El hombre los ató, les dijo que se tumbaran boca abajo y les disparó a cada uno por la espalda en la cabeza, según han revelado los investigadores, que señalaron que la familia se negó a revelar dónde se encontraba su ex mujer, Melanie, hermana de Katie Stay.
Cassidy también se tumbó en el suelo y fue tiroteada, pero la bala solo le rozó el cráneo. Fingió estar muerta y, cuando el asesino abandonó la casa, avisó a la policía, lo que permitió la detención del autor tras una espectacular persecución.
“Sé que mamá, papá, Brian, Emily, Becca y Zach están en un lugar mucho mejor y que seré capaz de verles otra vez algún día”, dijo Cassidy, quien salió del hospital el fin de semana para asistir al funeral multitudinario por toda su familia, que se celebró en Spring (Texas).
La menor, acompañada de su abuelo, subió al estrado y se dirigió al numeroso público con la entereza de un adulto y un mensaje positivo para el mundo que ha dejado perpleja a la sociedad estadounidense.
“La felicidad puede ser encontrada incluso en los momentos más oscuros”, dijo Cassidy, citando al profesor Albus Dumbledore, uno de los protagonistas de su libro favorito “El prisionero de Azcabán”, de la serie Harry Potter de J.K. Rowling’s.
La menor siguió el funeral a veces con lágrimas, otras con una sonrisa, para agradecer el apoyo que ha recibido de amigos y familiares y la atención de los médicos. Mostró su compromiso de “ser fuerte” con un saludo al público y un gesto con la mano que fue recogido por la prensa.
Los medios estadounidenses destacan la “increíble fortaleza” y el “coraje” de esta adolescente que, pese a que sufrió una fractura de cráneo por la bala, esperó a que el agresor se fuera para alertar que Haskell podría dirigirse a casa de sus abuelos.
Su abuelo, Roger Lyon, aseguró que con este gesto salvó de la muerte al menos a una veintena de personas y recordó la conversación que tuvo con la menor en el hospital.
“Dijo que sintió como si los ángeles estuvieran con ella”, señaló Lyon.
La familia formaba parte de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, el credo mormón.
“Todos tenemos un destino y esta joven tiene un destino”, comentó el psicólogo Terry Lyles a la cadena CNN y se mostró convencido de que Cassidy “tiene un propósito en su vida que acaba de comenzar”.
Haskell, de 33 años, que fue detenido tras varias horas de persecución ha sido acusado de asesinato. Durante su primera aparición en la corte el pasado viernes se desmayó dos veces mientras el fiscal leía los detalles de sus crímenes.
La prensa estadounidense revela que Haskell había tenido denuncias previas por malos tratos contra su esposa, que llegó a solicitar una orden de alejamiento y con quien tenía tres hijos.
En la negociación de los términos del divorcio en octubre pasado, llegaron a un acuerdo para eliminar la orden de protección a fin de facilitar la custodia de los niños.
Tras la masacre se ha puesto en marcha una recaudación de fondos por Internet con el fin de pagar el funeral, los gastos médicos y el cuidado de Cassidy, fondo que el sábado por la noche ya había alcanzado los 237.000 dólares.