En el año 2006, una mina terrestre hizo que Mosha, un elefante de 9 años, perdiera una de sus patas, imposibilitando su movilidad normal.
Desde ese fatídico accidente, los veterinarios tailandeses aunaron esfuerzos para fabricar una prótesis que se adaptara al paquidermo.
Hace unos días, este objetivo se logró. La Reserva Nacional Maeyong de Lampang, que se adjudica haber construido el primer hospital para elefantes, construyó una pata ortopédica para Mosha, que le ha devuelto su movilidad.
En el video, se observa que tras recibir su pata prostética el elefante toma un poco de arena y comienza a lanzarla por los aires, en clara señal de felicidad y agradecimiento.