Todo un ejército de gatos gobierna una isla lejana al sur de Japón, se acurrucan en casas abandonadas, caminan por un pueblo de pescadores donde el número de felinos supera el de humanos en la proporción de seis a uno, según señala el medio inglés Daily Mail y como se muestra en este video en YouTube.
En un principio, los gatos fueron introducidos en la isla de Aoshima, de un kilómetro y medio de longitud, con el objetivo de que acaben con los ratones que plagaban los botes de los pescadores. Al finalizar su tarea, los felinos se quedaron y se multiplicaron.
Más de 120 gatos pululan en la isla con solo un puñado de humanos que los acompañan, en su mayoría son personas jubiladas que no se unieron a la ola de migraciones en busca del progreso en las ciudades principales de Japón, luego de la Segunda Guerra Mundial.
Aoshima, a uno 30 minutos en ferry de la cosa de la prefectura de Ehime, fue el hogar de 900 personas en 1945.
Ahora, la única señal de actividad humana se da en los botes de turistas que llegan a lo que se conoce en el área como la isla de los gatos.
No hay restaurantes, vehículos, tiendas o quioscos donde vendan snacks, Aoshima no es un lugar cómodo para los turistas a menos que sean amantes de los gatos, en un país donde las leyes hacen difícil que uno puede criar mascotas.
Los gatos de Aoshima no son demasiado exigentes, sobreviven con bolas de arroz, barritas energéticas o papas que le dan los turistas. Sin la presencia de depredadores naturales, los felinos vagan por la isla sin temor.