Unos 300 trabajadores de la empresa azucarera Pucalá -ubicada en Lambayeque- marcharon por la capital de la región de manera pacífica para solicitar que el Poder Judicial no convoque a la junta de accionistas de la empresa, pues falta identificar a los titulares de dos millones de acciones.
Ricardo Pereira, actual administrador judicial de la empresa, señaló que su protesta por las calles de Chiclayo solo busca ser un llamado de atención a las autoridades. Afirmó que no cometerán actos de violencia.
El juez Rudecindo Damián Sandoval -quien está a cargo del caso hace una semana- aceptó reunirse con los representantes de los trabajadores. Luego de una reunión de solo 10 minutos, el juez aceptó revisar el caso antes de convocar a la junta de accionistas. El titular del Tercer juzgado Civil de Chiclayo busca con esta medida terminar con el largo enfretamiento por el manejo de la azucarera.
Los trabajadores continuarán su marcha hasta el Centro Cívico de la ciudad fuertemente resguardados por la policía.