James Collins quería tomar unos tragos con sus vecinos para celebrar su cumpleaños, pero se negaron, así que el hombre decidió llamar a la policía, en Fort Piece, Florida (Estados Unidos).
Los efectivos del orden pensaban que se trataba de una pelea en el vecindario pero cuando llegaron Collins les dijo que sus vecinos se habían portado mal con él, según TCPalm.com. Los oficiales le comentaron que no podía estar llamándolos para estos casos, pero aparentemente, no entendió.
Treinta minutos después, Collins volvió a llamar a la policía, pero estaba totalmente ebrio por lo que fue arrestado.