El atentado cometido por una terrorista suicida que cobró hoy la vida de 14 personas y dejó más de 30 heridos en una estación de tren de la ciudad rusa de Volgogrado quedó registrado por las cámaras de seguridad ubicadas frente al edificio.
La explosión tuvo lugar cuando la terrorista se vio obligada a pasar por el detector de metales instalado a la entrada de la estación Volgogrado-1, esto hizo que decidiera estallar matando a las personas que hacían cola en la puerta del edificio.
El artefacto explosivo tenía una potencia equivalente a 10 kilos de trilita, por lo que, según las fuerzas de seguridad, si la terrorista hubiera accedido a la estación podría haber causado una auténtica carnicería.
La estación, que se encuentra situada frente a la histórica plaza donde tuvieron lugar algunos de los más sangrientos combates de la Segunda Guerra Mundial, acogía un gran número de viajeros, debido al retraso de tres trenes y a las próximas fiestas de Año Nuevo.