“Vamos a perseguiros [a los israelíes] casa por casa y vamos a tomar venganza por cada gota de sangre derramada por nuestros mártires de Palestina. Este será el comienzo en el que despertarán las naciones musulmanas para derrotarlos”, ha declarado el general Hossein Salami, teniente comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, informa la agencia iraní de noticias Fars. En ese contexto, Salami ha elogiado la capacidad de resistencia de los palestinos “contra el racismo y los sionistas criminales”, en referencia a la nueva incursión militar de Israel en la Franja de Gaza.
“Ustedes [los israelíes] son árboles sin raíces que fueron plantados en tierras islámicas por los británicos”, señaló Salami, en referencia a la Declaración de Balfour de 1917, que condujo al desmantelamiento del Imperio otomano después de la Primera Guerra Mundial y a la posterior creación del Estado de Israel en 1948.
“El fin del régimen sionista [de Israel] ha llegado. Los movimientos islámicos están armados, los misiles están colocados y hoy somos testigos de cómo las armas de resistencia del mundo islámico tratan de controlar el trágico y brutal ataque del régimen sionista contra los palestinos oprimidos e indefensos en Gaza”, indicó el militar iraní en un sermón en el Día de Al-Quds que se celebra el último viernes del Ramadán.
Según sus palabras, las ocupaciones israelíes han llevado a “la formación de estructuras de resistencia palestina en los territorios ocupados” y señaló que en la actualidad no hay ningún lugar en los territorios palestinos que sean seguros “para el régimen sionista”. Asimismo, Salami ha culpado a EE.UU. y Reino Unido de apoyar las políticas y las actividades de Israel en la región y afirmó que “el equilibrio de poder va a cambiar en beneficio del mundo islámico”. “El mundo musulmán, en última instancia, será el cementerio de las políticas de EE.UU., el régimen sionista y sus aliados reaccionarios”, concluyó Salami.
El pasado 8 de julio Israel lanzó contra la Franja de Gaza una operación que denominó Borde Protector. Hasta el momento han muerto cerca de 1.000 palestinos, la mayoría civiles, y unos 6.000 han resultado heridos. Mientras, se contabilizan unos 40 soldados israelíes fallecidos durante la operación.