La ONU denunció hoy que lleva “meses” recibiendo amenazas de distintos grupos en Siria y confirmó que once empleados de la organización internacional han muerto desde que estalló el conflicto.
“En las últimas semanas y meses hemos hecho frente a amenazas de diferentes fuentes, han muerto voluntarios y personal de Naciones Unidas y otros han sido secuestrados”, dijo hoy la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos.
Amos, que habló con la prensa en la sede de Naciones Unidas a través de videoconferencia después de una visita a Damasco, confirmó la muerte de once empleados de la ONU y dijo que se toman “muy en serio” todas las amenazas que han recibido.