Carrie Fisher, de 56 años, ha vuelto a referirse en clave de autoparodia su presencia en las nuevas películas de La Guerra de las Galaxias.
Si hace ya varias semanas la veterana actriz se refirió con ironía a cómo sería la princesa Leia en el Episodio VII afirmando que sería «una anciana que está en una residencia intergaláctica», ahora Fisher habla de lo que supone para ella su todavía presunto fichaje por Disney y cómo se está preparando para el papel. Y lo hace con su sarcasmo habitual.
«Me encanta que Disney me quiera ahora, porque nunca me quisieron antes», afirmó en declaraciones recogidas por elCalgary Herald durante un evento celebrado en el marco de la Feria del Cómic de Calgary.
«Estoy contenta de que estén haciendo una nueva película, porque han mandado un entrenador a mi casa para que me ponga en buena forma. Así que, cómo podéis ver, me estoy comiendo todos dulces por adelantado. Así, cuando llegue el momento, me lo habré comido todo», señaló la actriz que, además de la comida, sigue conservando su querencia por las bromas.
En todo caso, entre broma y broma lo que queda claro es que Fisher da por hecho lo que parece ya un secreto a voces: su retorno junto con Mark Hamill y Harrison Ford para la nueva película de Star Wars que dirigirá J.J. Abrams.
El Episodio VII de La Guerra de las Galaxias, en cuyo guión ya trabaja Michael Arndt, ganador del Oscar por Pequeña Miss Sunshine y autor del libreto de Toy Story 3, se estrenará en verano de 2015.