La prensa sueca sigue creyendo en las opciones de su selección de clasificarse para Brasil 2014 a pesar de la derrota de anoche en Lisboa, y aunque reconoce la superioridad portuguesa y el papel de Cristiano Ronaldo, critica también su comportamiento.
«Aún no se puede descartar a Suecia», titula Dagens Nyheter, que admite en su crónica que a pesar de que el Mundial está muy lejos, «esta selección ha sobrevivido a caminatas por el ‘Valle de la muerte’ antes», aludiendo a las remontadas protagonizadas por el equipo en la fase de grupos.
Menos optimista se muestra otro diario generalista, Svenska Dagbladet, que titula «Inferior media parte» y resalta que Suecia debe de estar «contenta» porque solo encajó un gol y todavía sigue viva para el partido del martes en Estocolmo.
«En la vuelta debe subir a un nivel más alto, sino será gracias y adiós al Mundial por parte sueca«, escribe este periódico en alusión a Ibrahimovic, de rendimiento poco destacable ante Portugal.
Los tabloides Aftonbladet y Expressen inciden sin embargo más en algunas acciones poco deportivas de Cristiano Ronaldo, como un pisotón al portero Isaksson por el que vio tarjeta amarilla y un ligero cabezazo al lateral Lustig.
«Ira contra el comportamiento de Ronaldo… pero aún así iremos al Mundial», escribe en portada Expressen, para el que Suecia mereció mejor suerte y ahora ha visto reducidas sus opciones.
Algún jugador sueco como el centrocampista Sebastian Larsson insinuó que Ronaldo podría haber sido expulsado, aunque en general los nórdicos pusieron paños fríos a la situación y la enmarcaron dentro de lo normal en un partido de tanta intensidad.
«Me puse furioso con él, así que me acerqué y le grité. Me dio un pequeño cabezazo, me tocó en la ceja, pero no pasó nada más», admitió Lustig.
También Aftonbladet resalta que CR7 estuvo «mal encarado» y «quejón», aunque al final fue el «héroe» del partido con el gol del triunfo para Portugal.
Su actuación contrastó con la de Ibrahimovic, del que este diario señala que estuvo aceptable, trabajando para el equipo, también en defensa, pero no al nivel esperado.
«A Zlatan le sigue faltando la última muesca en la culata de la selección: ser decisivo contra los mejores equipos cuando es más necesario», escribe Aftonbladet.