n el siglo XIX eran comunes las fotografías post-mortem, como una manera de honrar y recordar a los fallecidos. Estas fotos eran tomadas momentos después de que la persona muriera y es común encontrar fotos de niños fallecidos, dado que en la era victoriana la tasa de mortalidad de infantes era muy alta.
Entradas relacionadas

Padres se tatuaron manchas de su hija para que no sea discriminada
La niña tiene manchas de nacimiento y sus padres quieren que ella no se sienta diferente. Los padres son capaces…

Los peces se comunican
Según los científicos de Nueva Zelanda más precisamente de la Universidad de Auckland afirman que los peces se comunican y no solo eso sino que son…
India : Empresario viste camisa de oro puro
El precio de la prenda alcanza los 150.000 euros, ya que está hecha de oro puro de 18 a 22…