Aferrada a la vida, la niña ha sido capaz de succionar leche materna y respirar por sí sola. Isidora nació con una patología llamada Anencefalia, enfermedad que afecta a uno cada 10 mil niños en el mundo. Y la cual provoca que el cerebro del feto no alcance a formarse.
La madre de Isidora, Romina, se enteró de la enfermedad de su hija sólo en el momento del parto, según comentó a TVN.
Y asegura que cuando tenía cinco meses de embarazo, se realizó una ecografía donde conoció el sexo de la menor, pero advierte que nadie le comentó que su hija padecía esta anomalía, pese a que esta enfermedad se diagnostica en los primeras semanas de gestación.
Frente a los casos de Anencefalia, en los países que donde el aborto terapéutico no esta permitido, la madre es preparada para enfrenta esta delicada situación. Pero en el resto del mundo, los médico interrumpen el embarazo por tratarse de un “feto inviable”.
La madre de Isidora denuncia que su hija no está enrolada en ningún consultorio, ya que la anencefalia es considerada fatal.
Pese a todo, la pequeña Isidora lucha cada día por su vida, en compañía de su madre, sus tres hermanos y su abuela materna.