Tras realizarle una compleja operación de alto riesgo para extirparle un tumor cerebral, un pez dorado de 10 años se viene recuperando en Australia. ‘George’ aparentemente tiene una muy buena relación con su amo Pip Joyce, con quien vive en Melbourne.
Salvar la vida del animalito le demandó a Pip unos 182 dólares. El veterinario Tristan Rich fue el encargado de la cirugía que duró 45 minutos en el hospital Lort Smith. Al animalito se le mantuvieron sus signos vitales bombeándole agua oxigenada en las agallas.
Mientras se recuperaba, también seguía conectado a un respirador. Ahora es capaz de nadar en su pecera. “George tenía un tumor bastante grande en la parte superior de su cabeza que estaba creciendo poco a poco y empezaba a afectar su calidad de vida”, dijo Rich.
Se espera que el pececito viva feliz otros 20 años.