Los hechos ocurrieron la noche de este martes cuando los bomberos locales y los agentes de la Policía de autopistas de California fueron alertados de un accidente de varios vehículos en la ciudad de Chula Vista (EE.UU.). Los bomberos fueron los primeros en llegar a la escena, donde estacionaron sus camiones de forma que bloquearan el tráfico en sentido contrario y atender a los que estaban en el lugar del accidente, informa el portal cbs8.com.
Cuando los policías llegaron al lugar de los acontecimientos, pidieron a los bomberos mover sus vehículos fuera de las vías de circulación o afrontar la detención. De acuerdo con la CBS, un agente sacó un camión de bomberos fuera de la escena con un paramédico a bordo antes de que este pudiera terminar de proporcionar la ayuda médica a las víctimas del accidente.
Mientras tanto, otro policía, por su parte, ordenó al bombero Jacob Gregoire, de 36 años, que aparcara bien el vehículo. Gregoire, un veterano con 12 años de servicio, se negó y continuó ayudando a las víctimas del accidente, pero el oficial le colocó las esposas y lo llevó a un coche de la Policía. El bombero estuvo detenido unos 30 minutos antes de ser liberado.
Posteriormente, el jefe de bomberos de Chula Vista, Dave Hanneman, en un comunicado calificó el comportamiento de la Policía local de «ridículo», mientras que el presidente del sindicato de bomberos, John Hess, elogió la actitud de Gregoire.
Los videos y fotografías del incidente fueron publicados en Internet y provocaron una fuerte polémica entre muchos comentaristas, que no podían creer lo que había sucedido. Las secuelas del incidente han girado principalmente en torno a quién tenía legalmente la razón.
En declaraciones al diario ‘San Diego Union-Tribune’ el subjefe de bomberos de la ciudad, Steve Ricci, reconoció que la Policía de autopistas de California tiene jurisdicción sobre los caminos, sin embargo, señaló que dado que los bomberos llegaron al lugar del accidente primero, ya habían tomado inicialmente el mando de la situación.
Tanto los agentes de la Policía de autopistas, como el cuerpo de bomberos se reunieron este miércoles para discutir cómo manejar este tipo de situaciones en el futuro. En una declaración conjunta, ambos departamentos se refirieron al acontecimiento del martes como un «lamentable incidente aislado», agregando que «no representa la manera en que nuestras agencias suelen trabajar juntas en un objetivo común».