Ante la inminente confirmación de la muerte del sanguinario terrorista «Alipio», muchos peruanos se preguntan quién es este personaje, cuál es su escala dentro de esta organización subversiva y cuál ha sido su camino hasta llegar a ser el segundo en el mando de Sendero.
Su nombre verdadero es Alejandro Borda Casafranca, nació el 11 de enero de 1967 en el distrito de Santillana, San José de Secce, en Huanta, Ayacucho y se cree que empezó a militar en las huestes terroristas de SL cuando desapareció a los 16 años de edad en 1983 por la selva ayacuchana.
Se convirtió en uno de los principales líderes de la agrupación, cuando poco a poco fueron cayendo sus principales integrantes, llegando a tener varios sobrenombres, primero fue Michel, luego Santiago, después Marco y finalmente Alipio.
Un hombre cuenta a La Voz de Huamanga que en 1985 Sendero estuvo a punto de llevarse a sus hermanas y como él intervino lo quisieron matar, pero providencialmente apareció «Alipio» quien fue su compañero de escuela. Lo reconoció e impidió su ejecución y el rapto de las menores de 13 y 11 años. Por ese entonces «Alipio» era conocido como «Michel».
Se sabe que sus padres son Agustín Borda Padilla ya fallecido en 1978 y Julia Casafranca Cartolín de 68 años. Sus estudios de primaria los hizo en el Centro Educativo Mixto del distrito de San José de Secce hasta el sexto grado. Sus estudios secundarios lo hizo en el colegio José Santos Figueroa.
«Según su madre, tiene una cicatriz en el brazo derecho cerca al codo, como consecuencia de la UTA. Otras versiones indican que tiene una cicatriz de proyectil de arma de fuego PAF en el antebrazo derecho, cerca al codo. Además, tiene una cicatriz de entrada por PAF, a la altura de la clavícula derecha con salida en la espalda, una herida por PAF en el muslo de la pierna derecha, parte interior», dice un informe que emitió el diario ayacuchano sobre el líder senderista.
Las autoridades informaron que habría sido abatido por fuerzas combinadas de las FFAA y de la PNP en el distrito de Llochegua, en la provincia de Huanta, Ayacucho cuando hacía incursiones armadas y cobraba cupos a narcotraficantes.
En un comunicado, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas indicó que el cabecilla de la organización terrorista desplegaba acciones de agitación y propaganda.