Mientras más atractivos sean las plazas de algún determinado país, mayor concurrencia social tendrá debido a que son el elemento central de la planeación entre grupos urbanos.
Es por eso que la National Geographic Traveler recorrió el mundo en la búsqueda de las cinco plazas públicas más bellas del mundo y consideró a nuestra Plaza de Armas cuzqueña como una de ellas.
PIAZZA DEL CAMPO, SIENNA, ITALIA: El corazón medieval de la Toscana late durante Il Palio, una carrera de caballos en el verano. El resto del año, la gente local trata al radiante espacio de ladrillos alineados como una estancia al aire libre.
PLAZA DE ARMAS, CUSCO, PERÚ: Esta plaza del siglo XII consiste de arcadas coloniales. Una iglesia con su complejo arquitectónico y una catedral delinean el núcleo de Cusco, pero sus bases reales son el trabajo de pedrería imposiblemente preciso que establecieron los incas.
PLAZA IMAM, ISFAHAN, IRÁN: Minaretes de mosaicos azules, un par de magníficas mezquitas y un palacio del siglo XVII delimitan esta plaza, donde los musulmanes se congregan los viernes. El Gran Bazar es un destino obligado.
PLAZA DE TIANANMEN, PEKÍN, CHINA: La “Puerta de la Paz Celestial”, que caracteriza a la plaza urbana más grande del mundo, se adorna con actividades como el vuelo de cometas coloridos y gente practicando tai chi.
PLACE DES VOSGES, PARÍS, FRANCIA: La primera plaza residencial planeada de Europa tiene arcadas con bóvedas y 36 pabellones que hacen juego con sus ladrillos rojos y de piedra. Su parque con filas de árboles fascina a los residentes, entre los cuales se encontró el escritor Víctor Hugo.