Tres mantos pintados, de unos 200 años de antigüedad, fueron hallados ayer en el Templo Matriz de San Jerónimo, ubicado en el distrito de Jazán, en la provincia de Bongará, por el equipo técnico de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo de Amazonas.
Los mantos, que miden aproximadamente tres metros de largo por dos de alto, simbolizan la crucifixión de Cristo.
Según los investigadores, estos mantos fueron elaborados por los antiguos Chachapoyas luego de la incursión de los españoles a estas tierras y la evangelización a cargo de las órdenes religiosas.
Para ello, se usó algodón y una diversidad de tintes naturales.