Según la agencia de noticias «Maan», Abdul Halim Ghanaam, residente en el campo de refugiados de Yalazun, al norte de Ramala, fue convocado por la Policía después de que la Inteligencia palestina rastreara sus llamadas y comprobar que estas se repetía muy a menudo el nombre del encarcelado exmandatario islamista.
Ghanaam explicó que simplemente se refería a su hijo, pero aún así no fue liberado hasta entrada la tarde de este jueves y debido a la presión ejercida tanto por su familia como por los defensores de los derechos humanos, revela la edición digital del diario «Jerusalen Post». EFE