El papa Francisco viajará a Tierra Santa del 24 al 26 del próximo mes de mayo en un peregrinaje que le llevará a Belén y Jerusalén, así como a la capital de Jordania, Amán, y que le convertirá en el cuarto pontífice de la era moderna en visitar los lugares sagrados de la cristiandad.
Tras el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano, el propio Francisco quiso anunciar hoy en primera persona las fechas de este viaje, que llega cuando se cumple medio siglo del primero que un papa de la era moderna realizó a Tierra Santa, el de Pablo VI del 4 al 6 de enero de 1964.
Este hecho hace que la visita del pontífice argentino a esa zona del planeta, que ya se preveía en la agenda de Francisco para 2014, adquiera una carga extra de simbolismo, más allá de por visitar los lugares que dieron origen al Cristianismo, por el encuentro que hace 50 años Pablo VI tuvo allí con el entonces patriarca ecuménico de Constantinopla, Atenágoras I.
«El objetivo principal es conmemorar el histórico encuentro entre el papa Pablo VI y el patriarca Atenágoras, que tuvo lugar exactamente un 5 de enero, como hoy, de hace 50 años», explicó Francisco ante una muy concurrida plaza de San Pedro en una desapacible mañana en el Vaticano. (EFE)