Irresponsable acto. Un niño de 2 años murió luego de que su precaria vivienda se incendiara tras caer una vela encendida al piso de esta. La madre del pequeño dejó encerrados a sus dos hijos para irse a celebrar el Año Nuevo.
En el inmueble, ubicado en el jirón 30 de octubre en El Progreso, Carabayllo, también se encontraba su hermana mayor, quien pudo ser salvada por su tía.
“Por la ventana primero saqué a mi sobrina, luego trate de sacar al chiquito pero no pude. Lo dejé por unos momentos para traer una pata de cabra, pero cuando regrese ya no estaba el bebé”, afirmó la tía a América Noticias.
Dentro de la vivienda se encontraba material inflamable como cartones y maderas, lo que ayudó a avivar el fuego.
Los familiares trataron de contactarse con la madre de los niños, pero no tuvieron éxito.