Era una de las atracciones para esperar el 2014 y miles de personas llegaron al puerto de Keelung, en Taiwán, para contemplarlo en vivo y en directo.
El problema es que el enorme pato amarillo que hace meses es exhibido en el país asiático no soportó y se reventó en medio de la fiesta.
Se cree que la creación de goma del artista holandés Florentijn Hofman, de 18 metros de alto, fue atacada por aves que habrían rajado el material.
La exhibición ya tuvo problemas antes, pues otro pato gigante instalado en otra zona de Taiwán explotó luego de un terremoto y otro tuvo que ser retirado del mar en septiembre por la amenaza de un tifón.