La historia de Kenny Gregory fue conocida esta semana al ser presentada una demanda en el juzgado local en donde el sujeto afirma que fue retirado de dicha escuela por la directora al no ser homosexual.
Gregory explica que él vive con su esposa e hijos y que solía compartir esa información con otros docentes. No obstante, la directora del centro, que sería lesbiana, no se sentía a gusto con él y lo despidió. Él señala que esto fue un acto de venganza contra su orientación sexual.
El docente tenía enseñando 16 años en dicha escuela, la prestigiosa Trinity School del Upper West Side de Manhattan, y en sus 50 años de servicio afirma que nunca ha tenido problemas.
La directora ha señalado que hubieron otros temas de por medio para que el hombre sea despedido. Ahora las autoridades investigarán el caso que ha sido catalogado como discriminación por orientación sexual.