SALUD : Corséts para bajar de peso y moldear tu figura

Los corsés están renacimiento en el mundo de la belleza y la moda de alta costura, pero lo más importante es que sirven además como apoyo para la espalda, por lo que puede ayudar a la salud. Los corsés también se pueden utilizar como parte de un programa de pérdida de peso siempre y cuando su uso se acompañe de una alimentación sana y un poco de ejercicio. Un corsé puede ser una opción no quirúrgica de algo parecido a una abdominoplastia.

Historia de los corsets

El inicio de los corsets comenzó en Francia con los coros y las cortes, eran unas prendas ajustadas. Los corsés fueron vistos por primera vez en las mujeres griegas, eran unas prendas rígidas que fueron usadas ​​hasta el final del período eduardiano. A partir del siglo XVIII 18 los corsé estilo reloj de arena ofrecían apoyo y consuelo tanto a hombres como a mujeres.

Perder peso con un corset

Un corset cómodo se lleva atado y se ciñe a la cintura. Funciona moviendo los órganos al instante hacia abajo y de la misma manera ocurre con los pechos, que los posiciona más arriba, dando la apariencia de una cintura más pequeña. Un corsé puede usarse durante varias horas seguidas permitiendo que seas capaz de comer menos alimentos y sentirte lleno/a mucho antes.

Consulta con un médico antes de intentar utilizar un corsé para la pérdida de peso. Para empezar, comienza a utilizar el corsé poco a poco, es decir, durante unas dos horas al día. A ser posible, cubre la hora de la comida. Poco a poco aumenta las horas de uso a no más de ocho horas al día. Los órganos tienen que acostumbrarse a la restricción y tu cuerpo también tendrá que acostumbrarse al movimiento restrictivo.

La mayoría de los corsés se llevan por debajo del busto sin embargo, la moda ofrece una opción muy amplia de estilos de corpiños, por lo que la variedad de estilos es muy grande. Si llevas un corset de los que solo llegan hasta el pecho, puedes llevarlo durante más tiempo y sin problemas debajo de la ropa.

El corsé en la zona del abdomen ofrece soporte para la zona lumbar. Esto mejora la postura y reduce el dolor en la columna vertebral. El corpiño limita el movimiento anterior y posterior y la rotación y es muy confortable dado dichas restricciones.

Los corsets con forma de relojes de arena están disponibles en algodón, seda, denim, PVC y cuero. Originalmente se utilizaban para dar forma y mantener el tipo de la usuaria. Hoy en día las varillas flexibles de acero y tiras enrolladas de metal permiten la flexibilidad y el soporte por más tiempo. Estos corsés, requieren pocos cuidados, pero no puede meterse en la lavadora.

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